CURIOSIDADES
ORNITOLÓGICAS:
EL GRAN INTENTO DE EXTERMINIO DE LOS GORRIONES EN CHINA DE 1958
Generó un
desequilibrio ecológico enorme, con perniciosas consecuencias. Una lección histórica
que parece haber olvido el hombre del S. XXI
Grupo de
machos de gorrión común (Passer domesticus) bebiendo agua
Mao
quiso exterminar a los gorriones de China, a los que consideraba una plaga
El que los gorriones comunes estén desapareciendo de
las ciudades, parece no preocuparle mucho al gran público, fuera de los
ornitólogos y los amantes de los pájaros, sin duda alguna por el
desconocimiento que se tiene de la importancia de los gorriones, pero para
ilustrar de ello con datos objetivos y rigurosos, rescatamos en este mes el
gran intento que se vivió en el año 1958, hace ya 57 años, en la China
comunista de Mao Tsé Tung (1893-1976) para exterminar a los gorriones comunes.
Un acontecimiento que ha sido estudiado con mucho rigor por la literatura
científica como John G. Gurley en su obra “El
desarrollo económico de la China comunista”; John King Fairbank “China,
una nueva historia”; Jonathan Clemens “Mao”;
entre otros.
Pareja de gorriones comunes
En 1958, en el marco del
proyecto denominado “Gran Salto Adelante”, en el que se pretendía que China,
una sociedad feudal, se transformara en una potencia agrícola e
industrial, el líder comunista Mao Tsé Tung, en un ejercicio de una iluminada
prepotencia sin límites, consideró que además de los opositores al régimen, que
había que eliminar, había cuatro grandes plagas que impedían el desarrollo del
pueblo chino y que por tanto debían ser aniquiladas: las ratas, los mosquitos,
las moscas y los gorriones. Concretamente sobre el gorrión común (Passer
domesticus), se decía que cada uno de estos pájaros se comía 4.5 kgs. de la
cosecha de arroz al año, lo cual supondría –según sus simplistas cálculos- que
por cada millón de gorriones muertos habría alimento para 60 mil personas.
La persecución
de los gorriones fue un proyecto en el que toda China se vio involucrada, y para llevar
a cabo la tarea, se diseñó una gama de procedimientos letales, como era cazarlos
con hondas, cepos y trampas, pero particularmente uno que consistía en evitar
que los gorriones se apoyaran en el suelo, persiguiéndolos y asustándolos
mediante ruidos hechos por los ciudadanos, muriendo así los gorriones por
agotamiento o permitiendo su fácil captura para matarlos tirándole del cuello o
golpeándolos contra el suelo, al no tener capacidad para defenderse el agotado
animalillo. Sin embargo, el procedimiento más frecuente era la eliminación
por envenenamiento. Los nidos también fueron destruidos, los huevos rotos y los polluelos que no los mataban directamente, terminaba muriendo
de hambre al faltarles el progenitor que les llevara la comida al nido. Y para
que nada de estos fallara todo venía alentado con reconocimientos públicos y
premios a los chinos que más destacaran en la muerte de gorriones. Dantescas
son las imágenes históricas que circular por algunos medios de aquella época,
en la que se ve a muchos chinos con cordones colgados a su cuerpo, con los
gorriones cazados y ensartados en alambres, como macabros trofeos.
Imagen
procedente de un periódico de Shanghai de la época, en que se exhiben a cientos
de gorriones muertos en una carreta ante el alboroto popular por el éxito de la
campaña maoista. Con el pie de foto: "Todo el pueblo se moviliza junto.
Los gorriones han sido eliminados”
La campaña
supuso un éxito, fueron millones los gorriones exterminados en China en
aquellos fatídicos años en la que los medios oficiales alentaban al pueblo a
matar gorriones, con consignas y proclamas contra estos enemigos del pueblo:
los pobres y desgraciados gorriones chinos. La consulta de prensa de la época
pone de manifiesto como aparecieron algunos héroes nacionales como un tal Yang
Seh-mun, de Yunnan, que tenía el honor de haber matado él solo a más de 20.000
gorriones.
Esta
carnicería estuvo a punto de aniquilar por completo a los gorriones, sin prestar
oídos a las voces de alarma que llegaban de la comunidad científica
internacional como la NAS (United States National Academy of
Sciences), alarmados por el plan de Mao, los que publicaron una
investigación en el que se aseguraba que "los gorriones comen más
insectos que grano" y preveían que su exterminio tendría perniciosas
consecuencias para la agricultura china.
La gran hambruna china
Mao no aceptó en un principio estas aseveraciones, que venían de un país
enemigo como Estados Unidos, por lo que se continúo algunos años más con el
masivo exterminio de gorriones, pero ocurrió algo que no habían previsto los
líderes chinos: debido a la extinción de los gorriones, al no contar los
insectos con sus depredadores naturales, comenzaron a multiplicarse por millones, tal y como habían
previsto los científicos americanos. Y se cuenta que enjambres de langostas,
cual relato bíblico, asolaron los cultivos.
La cosecha de arroz de aquellos años fue la más baja de la historia.
Entonces, ocurrió lo que se conoce como la gran hambruna china, donde murieron
de hambre entre 15 y 30 millones de personas, al generarse un desequilibrio
ecológico enorme, por cuanto los gorriones eran el control natural y agentes
reguladores del ecosistema agrícola. Al extinguir al depredador (el gorrión) su
presa (la langosta y otros insectos) se convirtieron en plaga y este desastre
contra los gorriones finalmente fue reconocido en 1959, cuando la Academia de
Ciencias de Líderes Educados dio a conocer las opiniones de algunos científicos
chinos respetables como Zhu Xi y Zheng Zuoxin, los que tras analizar la autopsia
de los sistemas digestivos de muchos gorriones y encontraron que tres cuartas
partes de los contenidos estomacales de los pajarillos eran insectos dañinos y
sólo una cuarta parte eran alimentos consumidos por el hombre. Esto demostró
que gorriones eran básicamente un pájaro beneficioso para los seres humanos y
se apuntó como la causa de la plaga que se estaba viviendo en China estaba en
el exterminio de los gorriones.
La miopía ecológica de Mao no le permitió ver que los gorriones eran sus
aliados y aunque tarde –los gorriones fueron prácticamente exterminados de la
faz de la gran China- se dio cuenta de que había estado equivocado, y se
dirigió a los medios oficiales con la célebre frase de "suàn le" (olvidadlos), con la que
se concluyó oficialmente la persecución de los gorriones, al tiempo que se
inició una campaña para repoblar de gorriones China, para lo que llegaron a
importar de la vecina y aliada Unión
Soviética 200.000 gorriones, que llegaron a China en
secreto, para evitar un descenso de la popularidad de Mao.
El gorrión una especie protegida en la actualidad
en China
Gorrión
común que ha capturado una libélula, lo que corrobora que la especie también
actúa como insectívora y no solo como ave granívora.
El 1 de agosto de 2001 se le
proporcionó en China al gorrión el estatus de ave protegida. Sin embargo, la
imagen negativa del gorrión derivada desde los tiempos de Mao seguía (y sigue)
causando estragos en la población de estas aves, por lo que el gobierno chino decidió
emprender una política de limpieza de la imagen del gorrión y el 26 de
diciembre de 2002 se dictó una nueva ley en la que la protección legal del
gorrión aumentó y la ley se encrudece con el cazador. Esta ley, decretada en la
provincia de Hunan, al sur del
río Yangtsé, promulga
que aquel que mate, cace o venda gorriones será "severamente
castigado". Sin embargo, la población china de gorriones, como en otros
muchos lugares del planeta, continúa bajando. Los defensores de los pájaros y
naturalistas alegan que esto es fruto de las agresiones que viene sufriendo la
naturaleza de modo general y en particular por el nocivo uso de pesticidas en la agricultura, lo que está afectando a las especies más próximas
al hombre, como ocurre con los gorriones.
© José Ángel Rodríguez